sábado, 9 de mayo de 2009

ENERO DE 1901: 26 SOLDADOS ESPAÑOLES DEMENTES PORCEDENTES DE LA HABANA (CUBA), INGRESARON EN EL MANICOMIO DE SAN BAUDILIO.

El martes, día 21 de enero de 1901, fueron desembarcados en el puerto de Barcelona, un total de veintiseis soldados españoles dementes, procedentes de La Habana, (Cuba).
Según publicó "La Vanguardia" en su día, la identidad y lugares de residencia familiar de estos soldados, que habían participado en la Guerra de Cuba, era la siguiente:
"José Justo Vargas y Antonio Nanclares Rodés, de Sevilla.
Manuel Casal Campos, de La Coruña.
Prudencio Mendia Unzueta, de Vitoria.
Julián Vega García, de León.
Dionisio Royo Manso, Juan Burgeut Hidalgo y Manuel López Gallo, de Madrid.
Muguel Cornet Yágüez, de Barcelona.
Anastasio Masalles Bullit y Jacinto Jové Molino, de Lérida.
Agustín Vaquería Herrera, de Palencia.
Pedro Celada Maestre, de Santander.
Juan Hernández Carbonell y Pedro Rodríguez Martín, de Valencia.
Juan Serrate Rosario, de Puerto Rico.
Juan Rodríguez Ferro, de Orense.
Salvador García Minuesa, de Murcia.
León Marcos Vicente, de Valladolid.
Juan Carballo Pulido, de Extremadura.
Manuel Rodríguez Casanova, de Lugo.
Maximino Martínez Pérez, de Acebuche.
Luís Hernández Campillo, de Zaragoza.
Juan Ramos Noda, de Cádiz.
Emilio González de Jibacoa (Cuba).
Félix Herrera Cortés, de Málaga.
En vista de su estado de gravedad, quedó en La Habana Felipe Juan Mengual, de Alicante"
Refiere este rotativo barcelonés que "Desde la plaza de la Paz, en carruajes preparados al efecto, los infelices alienados fueron conducidos al manicomio de San Baudilio de Llobregat"
Y termina con un sorprendente comentario. "Dícese que con ellos no ha venido relación alguna de los cuerpos o institutos á que han pertenecido ni el empleo que disfrutaban, de modo que será preciso formar un expediente para cada uno de ellos"
Imaginamos las muchas dificultades de todo tipo que conllevó este masivo ingreso de enfermos psiquiátricos , al carecer de la mínima información referida al diagnóstico de cada uno de ellos; inicio , duración y evolución de la enfermedad; antecedentes; si habían sido o no medicados y tipo de medicación, etc. Toda una delicada y árdua papeleta para el personal facultativo y para los Hermanos Hospitalarios de la Orden de San Juan de Dios, que en aquella fecha llevaban poco más de cinco años al frente del manicomio de San Baudilio de Llobregat.
FUENTE DE CONSULTA: "La Venguardia", miércoles, 22 de enero de 19o1. Página 3

2 comentarios:

Antonio García dijo...

Jeje, amigo Vendrell, como se conoce que en aquellos tiempos las personas no tenían derecho a la intimidad, porque mira que publicar nombres y apellidos y lugar de ciudad de procedencia.

Joan Vendrell i Campmany dijo...

Cierto, Antonio, en aquella época ni derecho a la intimidad ni a nada. Los soldados sólo tenían el derecho a obedecer y punto. Hoy en día sería impensable que un periódico publicara los nombres de las personas que ingresan en un hospital psiquiátrico, con la Ley de Protección de Datos, entre otras legislaciones.