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La historia de los hospitales psiquiátricos de Sant Boi de Llobregat (Barcelona), no está exenta de casos de ingresos de presuntos dementes, cuyas circunstancias personales, estuvieron rodeadas de oscuros intereses familiares o de otra índole, y que, desgraciadamente, no siempre fueron debidamente detectados, y si lo fueron, contaron con la complicidad del propio director del establecimiento (1)Ahora hemos tenido ocasión de conocer otro de estos casos, si bien afortunadamente, en aquella ocasión, la eficacia y el celo desplegado por dos Juzgados barceloneses, evitaron el ingreso de un pobre hombre procedente de un pueblo de la provincia de Lleida, que llegó en ferrocarril acompañado por una pareja de la Guardia Civil, con una orden de ingreso en el manicomio de San Baudilio de Llobregat. Copiamos del rotativo "La Vanguardia" :
" Leemos en nuestro apreciable cólega de la Gaceta de Cataluña:
""En un asunto gravísimo hubo de entender anoche el Juzgado de guardia, que desplegó un celo y actividad digna del mayor encomio.
Según tenemos entendido, vino á esta ciudad en el tren de Zaragoza, procedente de un pueblo de la provincia de Lérida, un sugeto acompañado de una pareja de la Guardia Civil, destinado al manicomio de San Baudilio de Llobregat por el gobernador de aquella provincia, suponiéndosele demente en virtud de un expediente formado por intrigas de familia. El pobre hombre, que nada supo de ello hasta el momento de tomar el tren en la estación de Cervera pudo avisar á un conocido lo que ocurría y éste telegrafiar á esta capital para que se procurase impedir tan incalificable atropello.
A su llegada á esta capital, las personas que se interesaban por aquel infeliz, le sujetaron á un reconocimiento facultativo del que resultó que no era tal demente, sino un hombre en su completo juicio y cabal razón, por lo cual, cerca de media noche se presentó la oportuna denuncia al Juzgado de guardia, que era el de las Afueras, escribanía de Teixidor, quien sin pérdida de momento se constituyó en la fonda donde aquel, con los guardias civiles se hospedaba, (éstos tenían órden del encargado de la familia del supuesto alienado, de salir á las cuatro de la madrugada para San Baudilio de Llobregat) instruyendo las oportunas diligencias que terminaron entrado ya el día y en méritos de los que se hubo de dejar sin efecto la órden de conducción é ingreso en el citado manicomio de aquella persona, víctima de las artimañas de algunos indivíduos interesados en perderle.
Terminadas las horas de guardia pasaron dichas diligencias al Juez del distrito donde radica la fonda indicada, quien no obstante ser día festivo dictó ayer las medidas que estimó conducentes para evitar la consumación del atropello que con aquel infeliz se trataba de cometer.
Nuestros plácemes á ambos Juzgados que con su celo y actividad han impedido la consumación de un crimen de lesa humanidad "" (2)
(1) "Dª Juana Sagrera o el caso de una detención ilegal en el Manicomio de San Baudilio" (Puede consultarse en este mismo blog, en el post correspondiente al sábado, 15 de noviembre de 2008)
(2) "La Vanguardia", martes, 3 de octubre de 1882. Pág. 4 (6256)
3 comentarios:
Gracias por el enlace Joan. Me ha recordado que mi madre me había contado de una familia que ella conocía de Barcelona y que hicieron pasar por loco a uno de los hermanos que tenía un carácter infantil y así los otros dos hermanos se pudieron repartir mejor la herencia. Que triste que pasaran estos casos.
Qué horror pensar que esto pudiera ocurrir. La maldad humana es capaz de todo, incluso de condenar a una persona a podrirse en un manicomio para usurparle sus bienes.
Antiguamente los manicomios eran el lugar donde se internaban también a los hijos no deseados frutos de las relaciones sexuales ilícitas de la gente con dinero e influencias.
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