He recibido una llamada telefónica de un buen amigo. Me dice que acceda a internet y en el buscador Google clique "Los santos peregrinos de Montserrat" y lea su contenido. Lo hago y aparece en pantalla una fotografía en color del abad de Montserrat, dom Josep M. Soler, junto con otras autoridades, eclesiástica y civil, a su derecha, mientras que a su izquierda está colocado un enorme cuadro de las montañas y la Virgen de Montserrat. El abad de Montserrat se está dirigiendo a un selecto auditorio. Su disertación, en Roma, tuvo lugar el pasado 28 de abril de este año, es decir, al día siguiente de la festividad de Nuestra Señora de Montserrat, y lo motiva con estas palabras: "Me ha movido a exponer este tema de "Los santos peregrinos de Montserrat" la presentación de los dos bellos cuadros restaurados recientemente por iniciativa del Sr. Embajador que nos muestran la montaña de Montserrat como trono de la Virgen, al que se dirigen una multitud de peregrinos", y después de continuar con unas breves consideraciones, pasa a enumerar la larga lista de santos que en vida acudieron a los pies de la Moreneta, dedicando a cada uno de ellos los comentarios en mayor o menor extensión, en función con la información histórica de que se dispone. Así, en el tercer folio cita a " Benito Menni, restaurador de la Orden de S. Juan de Dios y creador de la rama femenina".El interés de este buen amigo en que leyera estas páginas se centraba únicamente en esta escueta referencia de la presencia del Padre Menni a Montserrat que acabamos de reproducir. Es él una de las personas destinatarias de mis aportaciones a la investigación histórica que periódicamente, bajo el enunciado genérico de "Hechos poco conocidos o escasamente divulgados", referidos a la vida y obra de San Benito Menni, acostumbro a enviar a Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, Hermanos de San Juan de Dios y personas seglares interesados en estos temas históricos, fue testigo directo de mi satisfacción personal cuando entusiasmado le comuniqué que ya tenía lo que con tanto anhelo estaba buscando: Que el Padre Menni había estado en Montserrat.
Resulta que un día me desperté de repente, de madrugada, con una idea en mi cabeza. No recordaba haber leído en ninguna parte que el Padre Menni estuviera en Montserrat, siendo como era un gran devoto de la Virgen y las muchas estancias, algunas de larga duración, en Barcelona y su provincia. Lo primero que hice fue dirigirme al abad de Montserrat, dom Josep M. Soler haciendo esta consulta. Cuando había transcurrido cerca de medio año, me contestó, con fecha 8 de junio de 2004, informándome que tan pronto recibió mi carta, la pasó al Archivero del monasterio, Padre Marc Taxonera, quien le comunicó -- después de una primera consulta no exhaustiva -- no haber encontrado nada de lo interesado por mi. Se lamentó del restraso en contestar, justificándolo con la lentitud que requieren este tipo de trabajos. Dos meses más tarde me escribía el Padre Archivero informándome que después de efectuar las consultas en los lugares donde podría figurar su nombre, no había encontrado ninguna referencia del paso de Padre Benito Menni por Montserrat.
Pero mi alegría fue inmensa cuando con fecha 11 de enero de 2005, la Superiora General de la Congregación de las Hermans Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, Sor María Camino Agós, me enviaba una carta con unas fotocopias donde aparecía un extenso escrito del Padre Menni a su Superior General. Está fechado el 16 de julio de 1868, y en uno de los últimos párrafos le dice "Essendo un po'in in libertá in questi giorni per andare a Montserrat a fare 8 giorni dei santi esercizzi, il 24 del corr. seró di retorno ", que traducido literalemente viene a decir que "Disponiendo un poco de tiempo estos días para ir a Montserrat y hacer 8 días de santos ejercicios, el 24 de los corrientes estaré de regreso"
Así quedaba probada la estancia del Padre Benito Menni a Montserrat. Con fecha 27 de abril de 2005 lo recogía en mi trabajo "El Padre Menni se retiró al Monasterio de Montserrat para hacer unos Ejercicios Espirituales de ocho días de duración". Este trabajo, aparte de los destinatarios habituales, lo envié también al abad de Montserrat, junto con una biografía de San Benito Menni ("El coraje de un Profeta") .Ahora me complace constatar que esta mi pequeña aportación ha servido para que en Montserrat tengan constancia documental y cierta de que el Padre Menni estuvo en aquel monasterio. Y que en tan señalada efeméride lo haya incluído el abad al tratar este tema.
