En esta ocasión me limito a transcribir un artículo publicado en primera página del periódico "EL SOCIALISTA", órgano del Partido Obrero y publicado en Madrid, con fecha 19 de junio de 1918, que refiere la expulsión del Manicomio de San Baudilio de Llobregat de 60 dementes por el adeudo de la Diputación de Jaen de 90.000 duros a aquel establecimiento.
"Al mismo tiempo que la información sobre los horrores de la Inclusa de Madrid publicábamos en EL SOCIALISTA un telegrama en el que dábamos cuenta del caso horrible de haber sido expulsados del Manicomio de San Baudilio de Llobregat sesenta dementes. En ningún otro periódico hemos encontrado ni la noticia ni el comentario de este hecho horrible. Y nos parece que merece también alguna atención.
La Diputación adeuda al citado manicomio 90.000 duros. En el establecimiento no había recursos. Estaban agotados parece ser, todos los procedimientos para que la Diputación pagara. Y se decidió lo más radical: poner a la calle a aquellos sesenta locos.
Hay aquí encerrados varios problemas alrededor del problema capital de la desorganización y de la inmoralidad de la Administración española. Está el problema de la vida precaria de las Diputaciones que estrangula la acción económica de los Ayuntamientos con la percepción de contingentes enormes, y, sin embargo, no pueden o no saben atender a las necesidades que están a su cargo. Cada vez es más natural y más apremiante la vieja pregunta: " ¿Para qué sirven las Diputaciones?".
Estos días se están diciendo cosas monstruosas. El Hospital de Madrid está hoy en las mismas condiciones casi que en el tiempo en que se fundó. La mortandad de niños en la Inclusa es hoy la misma que hace treinta años. En el Colegio de la Paz más de las tres cuartas partes de los niños están tuberculosos... A cualquiera de estos depósitos de miseria que se llama establecimientos benéficos que miremos, veremos el mismo espectáculo de desamparo, de crueldad bárbara, de sequedad absoluta de corazón en quienes los dirigen y administran.
Y esto no es Madrid, sino en España toda. Quizás sea España el pueblo donde más desvalidos haya, donde más pobres, donde más enfermos. Un capitalismo que sólo atesora y no engrandece el desarrollo industrial y financiero de todo el país. Un Gobierno de mercenarios de este capitalismo atrasado y sin inteligencia, una oligarquía potentísima de caciques, extendida por todos los rincones de España que ahoga todos sus alientos y aplasta todas sus elevaciones morales y materiales,¿qué otro resultado habrá de producir?.
Toda España es la Inclusa de Madrid. Toda España es San Baudilio. En toda España las víctimas son cada vez más víctimas y los verdugos cada vez más verdugos. ¿Hará algo este clamor que se ha levantado ahora?.Arriba, viéndose está que no. Abajo, aún no sabemos. Abajo, tiene que crear una firme y ardiente voluntad de que el mal termine, que obligue a los de Arriba a cumplir sus deberes. En realidad, Abajo, este hecho y otros infinitos hechos iguales, que son la sustancia de toda la vida nacional, deben determinar un estado de conciencia en virtud del cual se destruya el mecanismo todo administrativo y politico que estos horrores tienen como consecuencia, y se sustituya por otro más democrático , y, por tanto, más moral, más humano y más justo".
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