miércoles, 26 de febrero de 2014

UN HECHO CIERTO, AUNQUE TENGA TODOS LOS VISOS DE TRATARSE DE UNA ANÉCDOTA.

Asilados en el Manicomio de San Baudilio de Llobregat, en sus momentos de ocio utilizando los servicios de la biblioteca de la institución. (Año 1910, aproximadamente).



De  la reducida documentación gráfica y documental de mis archivos,   que me ha sido   posible guardar como consecuencia de   mi cambio de domicilio, acabo de localizar,  entre  unas  carpetas de las  instituciones psiquiátricas de Sant Boi de Llobregat, una comunicación transcrita que en su día me confió el Hno. Francisco Sola Pagola (e.p.d.), de la Orden de San Juan de Dios,  siendo por aquel entonces Superior del Sanatorio Psiquiátrico Nuestra Señora de Montserrat, de Sant Boi de Llobregat.

Me había referido el Hno. Sola, en una nota que guardo escrita -- 22 de diciembre de 1967 -- que según le habían contado, en la biblioteca del establecimiento acudía con insistente regularidad  uno de los asilados que se carcaterizaba por ser  muy aficionado a la lectura,  y que prácticamente devoraba los libros que leía

El Hermano que por aquel entonces estaba al cargo de aquella biblioteca, no disponía  ya de  nuevos ejemplares para ofrecerle, a pesar de que periódicamente  se iban proveyendo de nuevos libros, algunos adquiridos y otros cedidos por personas del municipio  que deseaban desprenderse de algunos ejemplares de sus pertenencias.

En un momento dado, aquel buen Hermano tuvo la ocurrencia de ofrecerle un listín de la Compañía Telefónica Nacional de España, invitándole a que leyera aquel voluminoso libro, esperando de esta manera  que estuviera algún tiempo en devolvérselo para solicitar un nuevo  ejemplar.

Efectivamente, tardó varios días en acudir de nuevo a la Biblioteca del establecimiento para canjearlo por otro nuevo libro.

--- ¿Qué tal te ha parecido esta novela ? -- le preguntó,con toda naturalidad,  el Hermano responsable de la Biblioteca.

-- ¡Buffffffffffff! -- exclamó el atolondrado  asilado. Me ha parecido una novela muy mala, porque no tiene ningún tipo de argumento, pero ... ¡¡¡¡ joder, de personajes llegan a salir  la tira !!! .


2 comentarios:

Carlos Bas dijo...

Joan, es un relato muy simpático, útil para usar como chiste capturador de risas y sonrisas, no obstante es una demostración del valor mental desconocido que aveces nos sorprende, ese buen hombre era capaz de almacenar la lectura con honestidad y sin malicia, fue capaz de ingerir miles de nombres buscando un argumento y analizar el sentido de una narración inexistente, sin estar molesto por la calidad del contenido, solo intento disfrutarlo. Impresionante y digno de admiración.
Gracias Joan por compartirlo con nosotros.

Joan Vendrell i Campmany dijo...

Ciertamente que parece un chiste, amigo Carlos, pero te aseguro que así, y de esta manera, me fue referido por el Hno. Sola, que parece ser le había llegado por transmisión oral de la misma manera que se conocen otros muchos episodios de la vida real acaecidos en el día a día del transcurrir en aquellos recintos psiquiátricos, algunos de ellos colgados en otros posts de este mismo blog, y otros que guardo, no publicados, por no disponer de la debida autorización, por motivos obvios, de sus comunicantes.
Un saludo muy cordial, Carlos.