REGLAMENTO PARA EL BUEN RÉGIMEN Y ADMINISTRACIÓN DEL CEMENTERIO DE LA VILLA DE SAN BAUDILIO DE LLOBREGAT. AÑO 1877.
El día 11 de mayo de 1865, es decir, hace de ello 160 años, el obispo de Barcelona, Monseñor Pantaleón Monserrat y Navarro bendecía, y con ello se inauguraba, el cementerio de Sant Boi de Llobregat.
Los primeros entierros que se realizaron fueron los siguientes:
15 de mayo de 1865 : José Ollé Puig, de 16 meses de edad.
15 de mayo de 1865 : José Comas Rodés.
23 de mayo de 1865 : Teresa Elías Mercé, de 28 años de edad.
31 de mayo de 1865 : Rosa Corbella Parera, de 75 años de edad.
02 de junio de 1865 : María Durán, de 62 años de edad.
06 de junio de 1865 : Rosa Valls Blanch, de 70 años de edad.
10 de junio de 1865 : Elvira Vergés Pamias, de 3 años de edad.
15 de junio de 1865 : José Andreu Puig
28 de junio de 1865 : Rafael Gelabert Puig de 1'5 años de edad. (1)
CAPACIDAD INSUFICIENTE
Gregorio Gutiérrez Ortolá explica que " Las relaciones sostenidas entre la Junta del Cementerio y el Manicomio han sido casi siempre tirantes. El alto número de fallecidos en el mencionado Instituto hacían fracasar cualquier previsión de ampliación efectuada por la Junta", y cita este ejemplo "La capacidad del nuevo cementerio se hará pronto insuficiente. Un elemento no previsto en el primitivo proyecto será el causante de esta insuficiencia : los fallecidos en el manicomio. Así, el 13 de agosto de 1872 la Junta comunica al Dr. Pujadas y Mayans -- director del Manicomio -- que debido al alto número de cadáveres de su establecimiento creían que era de su incumbencia el costear el ensanche del cementerio que se ha quedado pequeño. Pujadas se negará aduciendo la igualdad de derechos de los internos con respecto al resto de ciudadanos. De todas formas, contribuirá con 1.500 reales para la construcción de un osario como alternativa temporal".
Más adelante, y ya en tiempos del Padre Benito Menni, de la Orden de San Juan de Dios, recoge " El 6 de enero de 1898 se firma un convenio, entre la Junta y la Dirección del Manicomio, referido a las condiciones de enterramiento de los fallecidos en el mismo. El Manicomio aportará una cantidad anual de 1.000 pesetas por tal servicio, sin tener derecho a utilizar el coche funerario para el traslado de cadáveres, el uso del cual estaba sujeto al pago de las tarifas vigentes, independientemente del pago de la cuota mencionada.
El 29 de agosto de 1912 se cede al Manicomio una parcela de 20 m2, dentro del recinto del cementerio, para el enterramiento de los fallecidos.
El 13 de septiembre de 1919 se firma un nuevo convenio con el Manicomio, efectuándose un incremento de 250 pesetas a la cuota anual -- de 1.000 ptas -- que hasta la fecha venían pagando por derechos de enterramiento" (2)
FOSAS COMUNAS
Atendidas las numerosas personas asiladas en los dos establecimientos psiquiátricos de Sant Boi de Llobregat, cuando fallecían, si sus familiares no disponían de nicho en el cementerio o bien carecían de familia, sus cuerpos eran sepultados en una amplia fosa comuna, sin ataud, cubiertos de cal y con una capa de tierra de cierto de grosor, y así sucesivamente unos encima de otros, hasta llegar al nivel de la superficie.
Título de propiedad funeraria del cementerio municipal .
AJUNTAMENT DE VILABOI.
En el transcurso de la Guerra Civil española ( 1936 - 1939),fallecieron en los dos establecimientos psiquiátricos de Vilaboi (3) (Sant Boi de Llobregat) 2.682 personas, que recibieron sepultura en fosas comunas del cementerio municipal.
Idéntico procedimiento se continuó efectuando hasta principios de los años sesenta del siglo pasado, por lo que, el cementerio municipal de Sant Boi de Llobregat es una inmensa fosa comuna, donde permanecen los restos de las personas fallecidas sobre las cuales se han construido las posteriores agrupaciones de nichos y espacios públicos. En cualquier actuación que requiera el más mínimo movimiento de tierras en el interior del cementerio, aparecen restos humanos que son depositados en la osera comuna construida en su día, donde se depositan igualmente los restos de personas enterradas en nichos de beneficencia y otros de los establecimientos psiquiátricos sin familia o que, teniéndola no se pueden hacer cargo de ellos, y que transcurridos los dos años son exhumados y depositados sus restos en la osera comuna.
LA DESINSTITUCIONALIZACIÓN
La Ley General de Sanidad de 1986 en España, que impulsó la reforma psiquiátrica, se inspiró en gran medida en la Ley Basaglia, que tuvo un impacto muy significativo en la reforma de la atención de la salud mental , promoviendo la desinstitucionalización y garantizando la atención de las personas con trastornos mentales a poder vivir en su entorno social y recibir las atenciones médicas adecuadas a través de las visitas ambulatorias.
En consecuencia, cuando una persona sufre algún trastorno mental, ya no es recluido en una institución psiquiátrica de por vida como sucedía antes. Los ingresos, de tenerse que producir, son de corta duración, dos, tres semanas, un mes, el tiempo necesario para poder evaluar cómo reacciona con la medicación prescrita y, una vez estabilizado, dado de alta para integrarse a su entorno familiar, y ser programado con visitas ambulatorias para hacer un seguimiento de su evolución.
Esto significa que, en el caso de Sant Boi de Llobregat, puede que queden todavía algunos enfermos de edad avanzada, y sin familia, que permanecen en aquellas instituciones hasta su fallecimiento, atendido que darles el alta significaría echarlos a la calle careciendo de todos los medios de vida digna.
(1) Arxiu Parroquial. Libro de Defunciones ( Años 1859 - 1875). Parroquia de Sant Baldiri. Sant Boi de Llobregat.
(2) Gutiérrez Ortolá, Gregorio."El Cementerio Municipal de Sant Boi. Evolución histórica".(Mecanografiado). Sant Boi de Llobregat. 23 de julio 1986.
(3) Durante la Guerra Civil española el municipio estuvo en manos republicanas desde su inicio hasta casi el final de la contienda bélica, y el nombre oficial de Sant Boi de Llobregat cambió por el de Vilaboi, atendido que durante aquel periodo en Catalunya se pretendió eliminar cualquier signo religioso.